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Jueves, 19 de septiembre de 2024

Tengo algunas preguntas para el señor Edmundo González. ¿De verdad no sabía con quién estaba lidiando cuando aceptó ser candidato a las elecciones venezolanas? ¿De verdad creía que Maduro y Castro (siempre se pierde de vista cuando se habla de Venezuela quién manda) entregarían buenamente el Poder? ¿De verdad pensaba que Maduro y Castro iban a reconocer su triunfo si ganaba? ¿De verdad no sabía que iban a usar a su familia para chantajearlo? ¿De verdad creía que iba a estar a salvo de los esbirros de Maduro dentro de la embajada de Sánchez en Caracas? ¿Por qué se trasladó de la Embajada de Países Bajos a la embajada española? ¿Sería porque el gobierno de Países Bajos no iba a permitir la obscena ceremonia de renuncia al triunfo de los demócratas venezolanos, que tuvo lugar en la embajada sanchista? Y. Por último. ¿No lo interpelan los muchachos muertos en las calles, los torturados en las cárceles?

Si eres el presidente electo de un país como Venezuela no puedes cagarte a la primera y firmar un documento que te niegue a ti y a los que se han jugado (y perdido) la vida y la libertad por ti. Un documento que diga que lo único que te importa es ponerte a salvo.

¡No me callarán! Proclama desde Madrid Edmundo González. Pobre hombre.

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© Juan Abreu, 2006-2019