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Jueves, 14 de diciembre de 2023
Sobre lo dicho por Abascal (el político más demonizado de la historia reciente de España) acerca de que “llegará el día en que el pueblo español querrá colgarlo por los pies”, a Sánchez, diré, atendiendo a mi experiencia, que ojalá alguien hubiera colgado, no de los pies sino del cuello, a los hermanos Castro. Y de paso a sus principales esbirros. Si esa era la manera (y lo era, y es) de ahorrar a los cubanos medio siglo de miseria, envilecimiento y depravación castrista. La violencia es algo abominable. Pero. Cuando se renuncia a la violencia para defender la libertad, se asegura el triunfo de los que están dispuestos a usar la violencia para arrebatárnosla. Como prueba el caso de los cubanos.