Juan Abreu
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Lunes, 9 de octubre de 2023
Los terroristas religiosos de Hamas atacan Israel y se comportan como lo que son: asesinos religiosos. Alá los lleva de la mano a la masacre y matan en su nombre, como no se cansan de berrear. No hay que perder de vista esto, que ningún medio de comunicación europeo, qué digo, ¡occidental!, mencionará: son asesinos religiosos.
He visitado Israel y admirado la grandeza de la democracia israelí. Cómo han convertido el desierto en un vergel haciendo lo que no han hecho sus enemigos: trabajar. Los miles de millones que ha entregado Europa a los palestinos (que, por mayoría absoluta, eligieron a Hamas para representarlos) los han dedicado, no a mejorar la vida de sus ciudadanos, sino a comprar armas para matar judíos. Israel ha declarado la guerra a Hamas y ha hecho bien, naturalmente. Pero. Es imperativo que no dejen a medias la tarea. Que maten hasta el último de los terroristas religiosos. La Paz futura pasa por el exterminio de los asesinos religiosos de Hamas. Asesinos que, por cierto, son palestinos. ¿O es que son chinos? Lo digo porque oigo a gente informada (Bustos), decir en televisión que hay que separar a los palestinos de Hamas. Ah, ¿si? ¿Por?
