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Lunes, 26 de junio de 2023
Un buen lector me envía este pertinente comentario sobre el desgraciado asunto Goya-Fabelo. Lo comparto.
Efectivamente, Fabelo es un globito inflado, un ilustrador a lo Boris Vallejo, aunque con pretensiones mucho mayores. Para colmo es un lacayo de la dictadura castrista (fue uno de los firmantes de la infame carta oficial del 2003 justificando la ola represiva de la Primavera Negra y las ejecuciones sumarias de tres pobres diablos de color por tratar de escaparse de la finca del mayoral Castro). Pero, ser un artista “comprometido” tiene sus ventajas, como las tiene ser de izquierda en el mundillo de las artes. Además, en el marco del arte en Cuba, no sorprende que se le tome en serio al lado de bromas de mal gusto como Flora Fong y Alfredo Sosabravo.
Goya, por supuesto, no necesita que lo defiendan, pero este tipo de cosa sigue siendo un escarnio. No culpo a Fabelo, ya que cada cual va a lo que le conviene, pero sí a los responsables, ya que se supone que tengan mejor ojo y sentido, por no hablar de seriedad y respeto.
ombre, 25 de junio de 2023