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Domingo, 16 de abril de 2023

En el Nairod de Rusti, anoche, ascendimos a la cumbre de una tortilla de bacalao y alcachofas. Nuestras cenas en el Nairod, al cuidado de Rusti, un muchacho grande y tímido, son en cada nueva ocasión, más grandiosas. Podría hacer literatura con la comida de Rusti, como es costumbre estos días, pero el arte de Rusti no lo necesita. Sólo diré, a fin de cuentas soy un escritor, que la cena de ayer en lo de Rusti me hizo sentir otra vez la plenitud de aquella tarde lejana en la cima de un volcán en Costa Rica, cuando nos atravesaban las nubes.

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© Juan Abreu, 2006-2019