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Jueves, 22 de diciembre de 2022

Hoy leí una noticia comiquísima, dada cuenta de que uno de los tipos más siniestros de la política española, Aitor Esteban, ha dicho que los españoles deben dar más dinero ¡y fondos europeos! para promover el euskera porque el euskera es “el tractor de la inteligencia artificial”. Estallé en carcajadas (lugar común) al leer eso. Santocielo. El euskera es sólo una jerga que no pasa de entrechocar de piedras grotescamente enunciado. Ya he contado que una vez en un tren dos mujeres comenzaron a hablar (apedrearse) en euskera y me tuve que cambiar de vagón. ¡El tractor de la inteligencia artificial! ¡Esos chirridos que ni los mismos españoles nacidos en la región vasca quieren hablar, hay que obligarlos. Y aún otra cosa, cuando escucho hablar en euskera percibo siempre un tufo a pólvora y a sangre. ¿No les pasa a ustedes?

Los nacionalracistas vascos, junto a los nacionalracistas catalanes, son dos infecciones parasitarias enquistadas en el cuerpo de la nación española, y en el ser de los españoles libres e iguales. Chupan y chupan y no han dejado de chupar (y matar para chupar más) desde el inicio de la nueva democracia española. ¡El tractor de la inteligencia artificial! Llevo casi una hora revolcándome en el suelo, me duele la barriga de tanto reír.

Aunque debo reconocer que lo del “tractor” fue la mejor metáfora que pudieron escoger para enunciar tal chorrada. Son gente rural, a fin de cuentas.

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© Juan Abreu, 2006-2019