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Sábado, 14 de agosto de 2021

MALLORCA (4). Como se sabe, durante años he ido confeccionando una lista de sitios a bombardear por una cuestión de humanidad (el mundo y la especie estarían mejor sin ellos). Suelo aconsejar dos tipos de bombardeo, con bombas de neutrones, o bombardeo convencional. Las bombas de neutrones para los países o ciudades que hayan alcanzado cotas insondables y altamente contaminantes de abyección, (Cuba, Nicaragua, Venezuela), estos bombardeos dejarían las estructuras intactas para que se pueda repoblar el lugar con gente más o menos civilizada, digamos japoneses mezclados con suecos, o newyorkinos (que ya vienen mezclados). El futuro será mestizo o no será. Pero no los agobiaré con mi lista de lugares a bombardear, lo que quiero es decirles que Mallorca ha entrado en la lista. No toda la isla, la parte llamada Campos, a pesar de ser un polvoriento secarral, es habitable. Lo que habría que bombardear de inmediato es la llamada zona de la Sierra de Tramontana que, al ser un sitio horripilante, ha sido declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. En realidad, la llamada zona Tramontana no es más que un montón de montañitas peladas, tristes y sombrías, como todo lo isleño, cubierta a tramos por una vegetación vulgar, pueblerina y deprimente. Ahí recomiendo un bombardeo convencional a ver si con suerte las montañitas y los matorrales que los cubren, desaparecen. Todo esa zona Sierra de Tramontana y sus calas es en realidad una trampa mortal, como pude comprobar al intentar acceder a una cala por consejo de una local sin malas intenciones (creo), que por poco me cuesta la vida. Las “famosas” calas mallorquinas no son calas ni son playas o playitas ni son nada aconsejable para un ser humano. Piedra y mar helado y ojo, en cualquiera de estas calas secretas y selectas siempre hay quinientos bañistas seriados y suicidas tratando de atravesar la barrera de piedras puntiagudas y vientos huracanados y llegar al mar, cosa que raramente consiguen. Después del bombardeo, que recomiendo encarecidamente, tal vez esa zona Tramontana sea habitable, aunque lo dudo, pero por ahora si van a Mallorca manténganse alejados de ella y confinados en el hotel más exclusivo posible. Hay una cerveza isleña aceptable y algunos vinos “de la terra”, dicen los locales pomposamente, que se pueden beber, más o menos.

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© Juan Abreu, 2006-2019